jueves, 15 de marzo de 2012


Comenzó con un músculo de la pierna, que moviste para que no se notara, después se expandió como el agua que sobra.
En el bucle que estás metido ahora mismo esta todo muy quieto, menos tú.
Caminando te has clavado piedras afiladas, y como no recordaste ponerte calcetines, ahora rojo es el suelo, y se inclina bastante, tanto que nadie puede evitar resbalar primero y terminar rodando cuesta abajo. Las piedras, que van por zonas, pueden tocarte o no y ojalá que no, aun si lo hacen da igual porque ya está recto todo, cúrate, claro, no seas tonto y sigue caminando sin bucle, con él o con otros más pequeños.
El agua puede seguir sobrando, aprovecha para aprender a bucear o bebétela.

No hay comentarios:

Publicar un comentario